La estructura, con un coste de 1,5 millones, se encenderá el 8 de diciembre y servirá para inaugurar la torre de la Virgen María. Sobre el calendario de finalización de las obras, se sabrá dentro de un año.
Un operario de la Sagrada Família, junto a la estrella que se colocará el 29 de noviembre / JORDI COTRINA
La cita es dentro de un mes, pero a la Iglesia siempre le ha gustado ir con tiempo. Por eso este lunes ha citado a la prensa y la rueda de prensa ha incluido una visita de obra al lateral de Marina con Provença, el lugar que queda al margen del circuito turístico (y religioso) y que se destina para seguir avanzando en la construcción de la Sagrada Família. Ahí yace, a la espera de ser levantada, la estrella de cristal y acero que es un derroche de ingeniería capaz de aguantar, dice el arquitecto jefe, Jordi Faulí, cualquier fenómeno natural. Podría soportar, al parecer, el impacto de un objeto de 100 kilos a toda velocidad, algo que no contemplan ni las 10 plagas que asolaron Egipto.
"Siguiendo lo que Gaudí determinó, la torre de la Virgen María finalizará con una estrella luminosa de 12 puntas", ha detallado Faulí. En el centro se colocará un foco para cada extremo. Será la segunda torre más alta del templo y la novena ya construida. "Ahora vendrán las otras cinco torres centrales, la de Jesucristo y los cuatro evangelistas, que ya están iniciadas", ha explicado el arquitecto jefe, al frente de la obra desde octubre de 2012. Substituyó en el cargo a Jordi Bonet, que había desempeñado esa función desde 1985.
La Torre de la Virgen de la Sagrada Família / JOAN CORTADELLAS